El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, reveló que ha sido informado de que es objeto de investigación por el asalto al Capitolio que tuvo lugar el 6 de enero de 2021. El fiscal especial Jack Smith envió una carta a Trump, según el republicano, notificándole su situación y dándole cuatro días para comparecer ante el Gran Jurado encargado de determinar si debe haber una imputación en su contra.

Trump, utilizando su plataforma de redes sociales Truth Social, arremetió contra el fiscal especial y lo acusó de actuar bajo las órdenes del fiscal general del Estado, Merrick Garland, quien, a su vez, actuaría bajo la dirección del presidente Joe Biden, su principal rival político. El exmandatario considera que esta investigación forma parte de una «caza de brujas» llevada a cabo por la administración demócrata.

Con una clara determinación, Trump afirmó que será el candidato republicano y se adelantará a Biden en las próximas elecciones presidenciales. Sin embargo, reconoce que la imputación en relación con el asalto al Capitolio es prácticamente un hecho, sumándose así a las acusaciones previas en su contra, que incluyen el caso de Stormy Daniels y una investigación sobre documentos clasificados que habría llevado consigo al abandonar la Casa Blanca.

El expresidente, de 77 años de edad, sostiene que todas estas imputaciones, incluida la futura investigación en Georgia sobre el intento de revertir los resultados electorales en ese estado durante las elecciones presidenciales de 2020, son motivadas por razones políticas por parte del Departamento de Justicia de la administración de Biden.

Las reacciones a esta noticia no se hicieron esperar dentro del propio partido republicano. El gobernador de Florida, Ron DeSantis, también republicano, expresó que Trump debería haber respondido «con más fuerza» frente a la toma del Capitolio por parte de sus seguidores. Sin embargo, DeSantis enfatizó que esto no justifica un procesamiento penal contra el exmandatario. Por su parte, Asa Hutchinson, exgobernador de Arkansas y aspirante a la nominación republicana, opinó que Trump debería suspender su campaña debido al complicado escenario judicial que enfrenta.