«Mario Vargas Llosa se enamora de su tía. Él es joven, menor que ella, pero igual se casa. Es un transgresor. Va a París llevándose varias experiencias, la más importante, según sostiene, es haber estudiado en el colegio militar: descubre al Perú profundo, el de todas las sangres, lo cual confirmará luego en la Universidad de San Marcos. Empieza a escribir entonces su primera gran novela: adolescentes que van descubriendo la vida y sus sinsabores bajo estrictas reglas escolares, que suscitan rebeldías y castigos. Vargas Llosa hace de poeta, escribe cartas de amor que vende a los alumnos enamoradizos, mientras va descubriendo el contraste entre los barrios residenciales y los populosos. «La ciudad y los perros” es un título que sintetiza lo uno y lo otro (…)» Continúa leyendo Vargas Llosa: el inmortal mortal